
Existen dos tipos de dietas: la Clásica o “Fuerte” y la Escalera Nutricional, que es la suave. Comprenderán fácilmente que son dos métodos que se adaptan a las necesidades, motivaciones y objetivos de cada persona. Ambos tienen un punto en común: consideran que la causa principal del sobrepeso, la obesidad y la diabetes es el Carbohidrato Rápido, aquel que hace subir muy rápido la glucosa en sangre y, por razones de supervivencia, se transforma en grasa, que el cuerpo adora porque está programado para considerarla una reserva de energía.
La dieta da un lugar central a las proteínas, que son alimentos naturales, muy saciantes, cuya digestión y asimilación es larga y difícil, obligando al cuerpo a gastar 32 calorías por cada 100 calorías absorbidas, lo que las hace extremadamente bajas en calorías.
Respecto al tercer nutriente universal, las grasas, el método solo permite una cucharada de aceite al día, preferiblemente de oliva o de colza, y la grasa del pescado azul, rica en omega 3.
El principio del método Clásico es que permite 100 alimentos, de los cuales 72 son ricos en proteínas y 28 son verduras. Proteínas tantas como se desee y verduras tantas como se pueda.
El método clásico se desarrolla en cuatro fases: dos para adelgazar y dos para no volver a engordar.
Fase de ataque: dura de 3 a 7 días según el peso a perder. Da resultados rápidos pero no admite desviaciones, salvo volver al punto de partida.
Fase de crucero: alterna un día de Proteínas + Verduras (PL) y un día de Proteínas Puras (PP), a una velocidad aproximada de 1 kilo por semana hasta alcanzar el Peso Justo.
Fase de consolidación: diseñada para evitar el regreso inmediato y brusco del peso perdido. Amplía la elección de alimentos lo suficiente para no recuperar peso pero no tanto como para seguir perdiéndolo. Se necesita 10 días por kilo perdido para que el cuerpo se acostumbre a vivir con el nuevo peso.
Fase de estabilización definitiva: ya no es una dieta, sino un estilo de vida y de alimentación, con un cuerpo programado para sobrevivir en un mundo de abundancia después de haber estado en modo escasez.
Fase de estabilización definitiva: ya no es una dieta, sino un estilo de vida y de alimentación, con un cuerpo programado para sobrevivir en un mundo de abundancia después de haber estado en modo escasez.
Las fases tercera y cuarta son esenciales porque aprovechan el esfuerzo hecho para adelgazar. Aquellos que recuperan peso después de perderlo siempre son los que no siguieron adecuadamente estas fases.
Para saber más sobre el Método Clásico Dukan, puede ver este video:
Para saber más sobre la Escalera Nutricional, haga clic aquí: